Mis hijas me desafiaron a subir la estrecha y empinada escalera del castillo de Blarney, para llegar a "besar la piedra de la elocuencia".
Aquí se explica muy bien la historia y mucho más!
Por supuesto que lo hice!!!

Subí y besé la piedra, así que de ahora en adelante espero tener ese don.
Veremos si logro hacer de este blog un medio más "elocuente"..........?